Ficha:
Autor: Steven Erikson
Fecha: 2016 (castellano)
Saga: Nacidos de la Bruma 5
Género: Fantasía épica
Sinopsis
Sombras de identidad es el quinto libro de la saga «Nacidos de la Bruma [Mistborn]», una obra iniciada conEl imperio final
y parte imprescindible del Cosmere, el universo destinado a
convertirse en la serie más extensa y fascinante jamás escrita en el
ámbito de la fantasía épica.
La sociedad de Nacidos de la
Bruma ha evolucionado en una fusión de magia y tecnología en la que la
economía se expande, la democracia se enfrenta a la corrupción y la
religión se convierte en una potencia cultural cada vez más influyente,
con cuatro fes distintas enfrentadas por la captación de conversos.
Esta
sociedad tan animada y optimista, aunque todavía tambaleante, se
enfrenta ahora a su primera amenaza de terrorismo, crímenes cuyo
objetivo es fomentar el descontento de la clase trabajadora y avivar las
llamas de los conflictos religiosos. Wax y Wayne, con la asistencia de
la adorable y brillante Marasi, deberán dar al traste con la
conspiración antes de que las revueltas civiles frenen por completo el
progreso de Scadrial.
Mi opinión
Seguimos con la quinta entrega de Nacidos de la Bruma, tras un inicio un tanto decepcionante en el que
nos encontramos con Elliot Ness en vez de una novela de Mistborn. Pero las últimas páginas de la anterior entrega ya presagiaban un acercamiento a la saga original, que avivó el interés por esta continuación. El resultado, sin ser sobresaliente, cumple su cometido con nota.
Sin duda este cambio fue una arriesgada apuesta por parte del autor: nuevo escenario, nuevos personajes, nuevas tramas.... En Sombras de identidad todos estos actores evolucionan a mejor. Los personajes se han desarrollado para pasar del grupo al individuo, quitando parte del peso aglutinador que tenía Wax en el inicio de la saga, aunque no deja de ser el prota absoluto. Wayne, Marasi e incluso Steris muestran su garra y brillan con luz propia, enriqueciendo mucho la novela a nivel de rol, cosa que se agradece.
En cuanto a la trama, muy marcada por los cambios sociales no tan distintos de la actualidad, con una lucha de clases en la que los obreros siempre pierden en pos de una corrupta élite política que además controla a los poderosos alomantes. En este escenario, el grupo de Wax es testigo del retorno del pasado, convertido ya en mitología tras 300 años de evolución humana, muy propensa al olvido. Aquí reside en mi opinión el encanto de esta nueva entrega: volvemos a Nacidos de la Burma, aunque ya no en aquel mundo apocalíptico de cenizas y ejércitos medievales. Algo que satisface sin duda a todos los amantes de la saga.
Aunque la naturalidad con la que los personajes se enfrentan a estas nuevas revelaciones son un tanto relajadas, por decirlo de alguna manera, se agradece encontrarnos con seres y dioses legendarios, interacción que enriquece la lectura y aviva la llama del lector, que se inflama a medida que se desarrollan los acontecimientos de menos a más, hasta el acostumbrado clímax final que te deja con ganas de más, ante los hechos que destapa el estadounidense.
Gracias Brandon por volver al redil.
No hay comentarios: