Los Cazahuesos - Libro II: Bajo este nombre (Parte II)

Capítulo diez

ESCENA UNO

Quick Ben, Kalam y Tormenta aparecen en Y’Ghatan, atónitos y tristes por lo que ven, las ruinas y los grandes túmulos cercanos. Ben deduce que fue el aceite de oliva y Tormenta se pregunta si el fuego fue intencionado. Ben siente algo y se dirigen hacia allí.

ESCENA DOS

Apsalar mira a Y’Ghatan, luego ve a los tres hombres dirigirse hacia ella; reconoce a Ben y Kalam. Cuajo y Telorast se ponen nerviosas pal verlos, especialmente al mago. Ben se pregunta si Apsalar está allí para vengarse de Tronosombrío, tranquilo al menos porque la chica no está bajo el influjo de ningún dios. Apsalar le dice que Ben huele a Hood, Kalam a Cotillion, Tormenta a un t’lan Imass y a su culto al fuego de vida, por lo que tal vez no son tan libres, como piensa el mago. Explica que "fuego, sombra y muerte" se alinean contra un único enemigo, pero dicho enemigo no es ya singular, puede que nunca  lo fuera y la alianza puede no perdurar. Kalam pregunta a Ben si trabaja para el Embozado, pero el mago responde que era al revés, pero ahora los dioses están en guerra y él necesita sopesar ambos bandos. Ben y Tormenta discuten y finalmente acuerdan viajar juntos para alcanzar al Decimocuarto. Ben pregunta a Apsalar a quién esconde (Telorast y Cuajo) y ella replica que son tímidos.

ESCENA TRES

Tras discutir, Hellian nombra cabos a Picajoso y Sinaliento para reemplazar a Urb, que es ahora sargento. Hellian se va y el pelotón discute, ambos cabos diciendo que si la mantienen borracha, todo estará bien.

Gesler no acaba de ver que sea buen momento para reorganizar a los pelotones, luego recuerda con tristeza a Verdad y las pérdidas causadas por matar unos cientos de fanáticos. Botella discute con Sonrisas si deben quedarse con Y’Ghatan (la rata) ahora que tiene una camada.

Koryk encuentra una fosa de indigentes y comienza a recoger huesos para reemplazar los perdidos.

ESCENA CUATRO

Violín y Gesler se reúnen con el grupo de Ben. Explican a Tormenta lo que le pasó a Verdad. Violín les dice que les contará la historia mientras intentan cogen al Decimocuarto y quiere presentarle a Ben a Botella.

ESCENA CINCO

Paran, el fantasma de Seto y Ganath se paran sobre un puente en un reino antiguo, anterior a las Fortalezas. Ganath explica que es la visión del inframundo jaghut. Verdith’anath, el Puente de la Muerte. Trata de convencer a Paran de que ese no es el camino, pero él dice que tuvo una visión. Ella le advierte que su espada de otataralita no será especial en ese reino. Paran llama a Karpolan Demesand y a la Asociación Comercial de Trygalle. Mientras se preparan para partir, Seto habla con Paran, le preocupa los Abrasapuentes muertos, terminada la guerra aparecieron en un ejército de muertos en Raraku y deben seguir una larga marcha. Pregunta qué significa ascender y Paran dice que realmente no lo sabe, pero explica su teoría de que los Ascendientes que ganan devotos se convierten dioses, los que no tienen devotos son como neutrales, no tienen cadenas, mientras que los dioses sin devotos siguen atados de alguna manera al renacer del culto: sangre para los ancestrales, recuerdos para espíritus menores… Termina diciendo que los ascendentes tienen algún tipo de poder. Seto le pide a Paran que les haga una carta, “El Soldado” para guiar su marcha. Paran pregunta contra quién marchan y Seto replica que más bien contra qué; son interrumpidos porque deben irse.

Cruzan el puente y son asaltados, perdiendo algunos hombres. Llegan a los restos de otro carruaje de la Asociación y creen que fue atacado por el verdadero Guardian del Puente o alguna otra fuerza. Paran cree que fueron los dos Mastines de Sombras que liberó de Dragnipur;  que vinieron allí porque necesitaba "incendiar el rastro"; aunque no lo sabía en ese momento, ni tampoco el daño que causarían.

ESCENA SEIS

Despejan el camino y llegan al final del puente. Pasan por un dintel y se topan con agua al otro lado. Paran dice que el lago no debería estar allí; agua de una riada. Los interrumpe un llanto lastimero y el sonido de un trueno que anuncia que algo enorme se acerca. Huyen costa arriba.

Capítulo once

ESCENA UNO

El grupo de Navaja sigue su camino. Heboric reflexiona sobre los cautivos en las estatuas de jade, la idea de que se debe matar a Icarium para que no derrame más sangre, hacer regresar a Fener y que Treach y Fener compartan el Trono de Guerra. Piensa en la relación entre dioses y adoradores y, a medida que escucha más voces que le ruegan, se pregunta si así es como se siente un dios.

ESCENA DOS

Navaja se pregunta si realmente necesitan seguir viajando por zonas tan áridas, ya que parece claro que nadie los persigue. Scillara les dice que Heboric los ha estado guiando a través de viejos caminos y ciudades de eras muertas. Navaja pregunta por qué y ella replica que a él le gustan sus pesadillas; que la gente exprime la tierra seca como se hacen unos a otros, jerarquía, injusticia y opresión. Ella dice que el culto de Bidithal llegó a esos desposeídos; pero Heboric la corrige, diciendo que era idea del Dios Tullido, la promesa de algo mejor más allá de la muerte. Está de acuerdo con Scillara en que es una idea poderosa y seductora, pero si es mentira, la mayor traición de todas, por eso deben usar la verdad contra  el Encadenado.  Scillara pregunta como sabe si es mentira y Heboric argumenta que si la absolución es gratuita, todo lo que hacemos aquí y ahora no tiene sentido, lo que invita al caos.

ESCENA TRES

Pust y Mogora discuten. Mappo comienza a agitarse ligeramente, su cuerpo cubierto por telarañas sanadoras.

ESCENA CUATRO

Mappo despierta en un reino, Jacuruku unos años antes de su caída. Habla con Ardata, que se pregunta qué interés tiene Tronosombrío en él e Icarium. Ella le dice que Veed lo ha reemplazado y que los Sin Nombre, que quieren usar a Icarium, son los causantes. Entiende entonces los planes de Tronosombrío y le ofende que acierte con su lealtad (Ardata) en esa causa. Lo envía de regreso para despertar al lado de Pust y Mogora.

ESCENA CINCO

El monstruoso guardián persigue al grupo de Paran colina arriba. Paran hace una carta y envía a la bestia a través de ella.

ESCENA SEIS

El grupo de Paran observa cinco enormes estatuas negras y dos pedestales vacíos de los mastines. Paran cree que los dos mastines que liberó de Dragnipur se reunieron con sus congéneres y luego alguien los liberó. Seto explica que llegaron al campamento de Sha’ik y Karsa los mató, lo que sorprende a Paran. Ganath comenta que Dessimbelackis creía que un alma convertida en siete lo haría inmortal, un ascendiente que quería ser un dios. Paran dice que los Deragoth son mucho más antiguios y ella replica que su especie estaba casi extinta cuando Dessimbelackis los encontró y los usó como un recipiente de conveniencia, un relato que contiene a los eres'al, domesticados por los mastines que los adoptaron y que dieron origen a los Imass y luego los humanos. Una explicación simplificada de la historia.

ESCENA SIETE

El grupo de Paran descubre un posible templo al pie de las estatuas. Ganath y Paran entran y encuentran los cuerpos de Sedora Orr y Darparath Vayd (del destrozado carruaje del Gremio del puente) asesinados como sacrificio. Creen que eso significa que los Deragoth están cerca y Ganath acepta ayudar. Seto quiere colocar cargas para volar las estatuas, pero se pregunta si los Deragoth irán tras sus sombras (como hicieron los otros dos) antes de volver a su reino natal, algo en lo que Paran no había pensado. Paran usa la carta de la Gran Casa de Sombra para comunicarse con Tronosombrío y le advierte que los Deragoth están a punto de ser liberados. Tronosombrío recapitula los hechos: los Sin Nombre liberan a Dejim Nebrahl, Paran libera a los Degaroth para que maten a Dejim, Karsa mata a dos degaroth y busca al resto, y Paran quiere que envíe a los mastines de Sombra a encontrarse con los degaroth para que por fin decidan ir a por Dejim, en principio parece que el dios no quiere que ese encuentro sea en Sombra, por lo que parece aceptar enviar los Mastines a Siete Ciudades.

ESCENA OCHO

Seto explica a Paran que la voladura de las estatuas no funcionará según lo planeado y que deben irse y dejarlo solo. Paran dice que lo esperarán el mayor tiempo posible. Karpolan advierte a Paran tras la segunda explosión que tiene dificultades. Aparece uno de los Deragoth y Karpolan abre una puerta a un reino de pesadilla, lleno de muertos vivientes que se aferran a ellos pidiendo que los lleven. Ganath los lleva a un nuevo reino en un glaciar; el carruaje desliza sin control y vuelca (Paran, acaba algo mejor parado). Un desastre: el carro destrozado, varios accionistas muertos y otros heridos, y uno de los no muertos logró pasar con ellos. Deciden acampar.

ESCENA NUEVE

Seto sale de su escondite, feliz de que su plan de quedarse solo funcionara. Explora, pensando que la absolución la dan los vivos, no los muertos, y hay que ganársela.

ESCENA DIEZ

Scillara piensa en su pasado: su madre seguidora del campamento del Regimiento Ashok, la muerte de su madre, ella como seguidora del campamento, el culto de Bidithal y su promesa del paraíso después de la muerte, Heboric arrastrándola. Piensa que el Dios Tullido encontrará muchos adeptos y el mal crecerá sin control. Ella y Heboric discuten del equilibrio y el flujo. Llegan a una árida cuenca árida llena de restos. Empiezan a cruzar.

ESCENA ONCE

Heboric considera el papel de Destriant: el derecho de matar y repartir justicia en nombre de un dios, él piensa que no puede hacerlo y que Treach eligió mal. Llegan a una vieja aldea, plagada de moscas. Heboric se sorprende y se alza en la silla.

ESCENA DOCE

Son atacados por unos t’lan imass que surgen del suelo. Scillara cae, a Ranagrís le cortan una pierna, Navaja yace herido de gravedad y Heboric aparentemente muerto.