Hace unos días, a Mis Vidas de Papel nos llegó una peligrosa advertencia:
" ¡La luz se desvanece! ¡El enemigo avanza! ¡La guerra es inminente!
¡Hola, soy Diana, maga de la luz! Te doy mi enhorabuena: has abierto el email sin sufrir las consecuencias del hechizo que lo protegía del enemigo, lo que significa que tu corazón es puro y que en tu espíritu brilla la magia de la luz. Tal vez te parezca exagerado, pero te aseguro que en estos momentos todas las precauciones son pocas. Los enemigos del bien son cada día más poderosos y sus siervos están por todas partes. Es muy posible que ahora mismo tengas cerca una maga oscura, un brujo o incluso un vampiro... No, no levantes la vista, es mejor que no sospechen que lo sabes; disimula y continúa leyendo...."
¡Hola, soy Diana, maga de la luz! Te doy mi enhorabuena: has abierto el email sin sufrir las consecuencias del hechizo que lo protegía del enemigo, lo que significa que tu corazón es puro y que en tu espíritu brilla la magia de la luz. Tal vez te parezca exagerado, pero te aseguro que en estos momentos todas las precauciones son pocas. Los enemigos del bien son cada día más poderosos y sus siervos están por todas partes. Es muy posible que ahora mismo tengas cerca una maga oscura, un brujo o incluso un vampiro... No, no levantes la vista, es mejor que no sospechen que lo sabes; disimula y continúa leyendo...."
Tras Diana se encuentra Mark J. Leiver, autor español que se adentra en el mundo de la fantasía de corte juvenil con La Dama Sombría, libro que ha llegado ha nuestras manos por medio de un hechizo; bueno, realmente ha sido por medio de Correos, pero es cierto que ha tenido su lado mágico.
Tras recibir el mensaje de Diana, me pasé por la web de la editorial para saber un poquito más de la propuesta de esta valiente maga de la luz, encontrándonos con esta sinopsis:
"Orión tiene quince años y lleva una vida de lo más normal: su mejor amiga colecciona dragones de peluche y él, por su parte, intenta no morir de aburrimiento en el instituto. Bárbara también tiene quince años, aunque su vida es bastante más interesante: su mejor amiga es una poderosa maga de la luz y ella es hechicera de combate. Bárbara y Orión viven en la misma ciudad pero no se conocen de nada. Sin embargo, el destino del universo depende de que lo hagan. Aunque Orión no lo sabe, él es el elegido, la persona destinada a derrotar a la Dama Sombría, una criatura de la oscuridad empeñada en destruir nuestro mundo. Así, ambos deberán vencer a los siervos de la sombra en una misión a contrarreloj llena de magia, aventura, amor y peligro. Mientras, los servidores de la Dama Sombría tratarán de eliminarlos a toda cosa… ¿Lograrán cumplir la misión con éxito?"
Yo ya tengo una edad (mala) en la que los problemas del instituto quedaron muy atrás, por lo que no suelo ser muy receptivo a propuestas de corte juvenil (¡¡Ay Crepúsculo, cuanto daño has hecho!!), por lo que le pedí a Mark que me enviara un par de capítulos para ver "de que iba esto". Todos somos conscientes de la ardua tarea que es para un escritor dar a conocer su obra. Normalmente disponen de unos pocos ejemplares (muchas veces costeados por uno mismo) para repartir y no quería que tanto esfuerzo quedara cogiendo polvo en mi estantería. Así que prefería leer un poco antes de aceptar que me enviara el libro.
Los dos capítulos que pude leer me dejaron boquiabierto: unos diálogos muy buenos a base de humor negro e inteligente, personajes introducidos de manera muy amena y que en pocas páginas ya presentan un buen grado de profundidad, un wordbuilding interesante... Vaya, que me zampé las 50 páginas ante la mirada atónita de mi jefe:
—¿Qué miras tan absorto en tu pantalla?
—¡Naaa.... Aquí salvando el mundo de la oscuridad!
—Pues si quieres cobrar a fin de mes salva el mundo el fin de semana, ¡anda!
Culpable! Mark, como Peter Pan, me ha devuelto a la juventud ya perdida. Pero, ¿quién es este chico que se presenta como escritor y hechicero?
Dejemos que sea él mismo quien se presente y nos explique:
"Escribir fantasía es
sencillísimo… Siempre y cuando se posea una buena dosis de locura. ¡Que nadie
se lleve las manos a la cabeza, pero es que es así! Podemos utilizar, si
queréis, un eufemismo y decir «imaginación» en lugar de locura; sin embargo,
tanto monta, monta tanto. Porque amigas y amigos, escribir sobre elfos,
dragones, brujas y demás criaturas fantásticas es un verdadero alucine. O, como
diría Orión, el protagonista de mi novela: ¡Un disparate!
Pero, ¿quién ha dicho que la
cordura sea mejor que la locura? ¿Acaso hay una norma que obligue a tener los
pies en el suelo? ¡No, por el Innombrable! Para eso ya están todas esas cosas
del día a día que tantas alegrías nos dan a lo largo de nuestra vida: el
instituto, el trabajo, pagar el alquiler (incluso hay quienes, en un arranque
de virtuosismo, pagan hipoteca), la declaración de la renta, las obligaciones
familiares…
Lo bueno de la fantasía es que,
mientras estamos en ella, nos olvidamos de todo lo demás. ¡Qué alegría para los
oídos el canto de los elfos! ¡Qué gusto para el paladar las pociones de las
ninfas! ¡Qué virguería para la vista las altas y oscuras torres de los
nigromantes!
Elfos, nigromantes, ninfas… ¿Cómo
no me da vergüenza escribir sobre tales cosas? Es como cuando alguien me
pregunta sobre mi profesión y yo, que soy un tío práctico, sensible y algo
inocentón, respondo que soy escritor.
—¿Escritor? —Vuelven a preguntar.
—Sí señor —respondo con
cortesía—. Escritor. Para servirle a usted y a la editorial.
—¿Y eso es un trabajo?
En ese momento mis ojos bizquean
una miaja, pero me mantengo firme.
—Más o menos.
—¿Y eso da para vivir?
Tras esa cuestión, la sonrisa
está asegurada. Y luego la conversación se va por derroteros más interesantes
para el interrogador, y más aburridos para el interrogado; es decir, yo. Porque
además de un puntito de locura, quienes nos dedicamos a la novela fantástica
tenemos una buena dosis de ego. Aunque diré, si es que señalar los defectos de
mis conciudadanos sirven para aminorar la culpa, que todos los escritores y escritoras
tenemos mucho, mucho, mucho ego. Y nos encanta hablar de nuestras novelas. Y
disfrutamos cuando alguien nos dice que le gusta cómo escribimos. Pero en el
fondo somos entrañables; he conocido a escritores con los que daban ganas de
hacerse un peluche para achucharlos.
¿Por dónde iba? ¡Ah, sí, por lo
de mi maravillosa novela! ¿O es que todavía no he hablado de ella? ¡Vaya, no
quisiera ser una de esas personas que se enrollan a base de bien!
Vale, me presento. Soy Mark J.
Leiver. Editorial Tandaia acaba de publicar mi primera novela de fantasía,
llamada La Dama Sombría. Como está escrito en la biografía que acompaña a la
edición en papel, actualmente vivo en algún valle muy remoto del pirineo
aragonés, junto a mi hermosa mujer. El pirineo es un lugar maravilloso para
perderse; pero, sobre todo, es ideal para inspirarse. Los ríos, las cumbres,
los lagos… ¡Todo está lleno de musas!
Y esas musas han sido las que me
han llevado a escribir una novela de fantasía como La Dama Sombría. No diría
que se trata de una historia al uso, en tanto he intentado alejarme de los
cánones clásicos de este maravilloso género. No obstante, entre capítulo y
capítulo, donde Bárbara y Orión nos narran sus peripecias (tanto como
adolescentes normales en nuestro mundo, como en la lucha contra La Dama
Sombría), hay una buena ración de magia y criaturas como elfos, ninfas,
hechiceras y magos.
Pero no voy a desvelar mucho más
de la historia, porque merece la pena adentrarse en ella y descubrir, párrafo a
párrafo, lo que ambos tienen que contar.
¡Que el poder de las ninfas os
guarde!"
Sinceramente, creo que me lo voy a pasar muy, pero que muy bien leyendo La Dama Sombría. Ya os contaré en un tiempo (que será menos si mi jefe me vuelve a pillar leyendo cosas raras en el PC)...
¡Me lo apunto! Me encantan los libros con humor negro en literatura juvenil.
ResponderEliminarSaludos.
Tiene muy buena pinta la verdad. Yo tengo muchas ganas de leerlo y como te digo, ya se me pasó el arroz en cuanto a literatura juvenil, pero esas primeras páginas me dieron ganas de sacar los pantalones cortos y los calcetines azules hasta la rodilla....
EliminarUn saludito!!